David y Goliat

Según dice la biblia, existía un joven hombre llamado David el cual era pastor, también cuenta que había

un gigante el cual se llamaba Goliat y creía que con su enorme fuerza podía abuzar de todos. El gigante Goliat siempre llevaba consigo cascos, una gran coraza y en su mano llevaba un fuerte escudo y en la otra una larga y dura espada que usaba para cortar a sus víctimas. Un día Goliat comenzó a decir muchas bravuconerías las cuales atemorizaron a todas las personas del pueblo, Goliat decía que mataría a todos por simple diversión diciéndola con carcajadas en el rostro.

Mientras Goliat decía esas palabras se iba acercando a cierto pueblo en donde vivía David, un joven muchacho dedicado a ser un pastor de rebaños y que cultivaba la tierra para poder sobrevivir, era un chico alegre y siempre iba por las tardes después de todo el trabajo duro en su rebaño, se relajaba en el rio para darse un chapuzón pero cierto día todo se tornó oscuro pues Goliat había llegado al pueblo de David.

David no pudo soportar la idea de que Goliat llegara a su pueblo y lo destruyera todo solo porque él era grande y fuerte, David pensó que debía detenerlo por lo tanto ideo un plan y decidió enfrentarse a él. Aunque muchos aldeanos trataron de detenerlo él no lo hiso y se abalanzó contra Goliat. Cuando Goliat se enteró de que aquel joven muchacho lo enfrentaría se echó a reír tan fuerte que se oyó por todos los pueblo, peor aún que Goliat siguió riendo con ese enorme tamaño suyo, David no se acobardo y sin decir nada coloco una piedra sobre su honda, apunto mejor que nunca y se lo lanzo a la altura de la frente. Noqueándolo al instante.